Éxito del taller de Haikus

Pese a las inclemencias del tiempo, los valientes guerreros (de la cultura) de Página en Blanco resistieron. El pasado 23 de abril, Día Internacional del Libro, tuvo lugar el primer Taller de Haikus de la asociación.

A pesar de que llovía a cantaros se pudo realizar este taller, que se trasladó a la librería Punto y coma, librería fantástica de nuestra ciudad. allí, ya refugiados y calentitos, pudimos disfrutar del calor de las letras y su magia.


Un haiku es un poema breve de origen e inspiración japonesa. Nace, como las canciones populares, en el pueblo. Pero y, gracias a su renovador Matsuo Basho, el poeta más grande de Japón, se elevó el haiku (o hakai) a la categoría de arte.
Las características del haiku son lo que lo hacen tan inusual y, por tanto, especial: un haiku se compone de una sola estrofa de tres versos, conocidos como moras, con la estructura 5/7/5. En total, 17 sílabas.
Aquí tenéis un ejemplo:

Este camino,
ya nadie lo recorre
salvo el crepúsculo.
                    Matsuo Basho

Otra de las características fundamentales es la temática: la naturaleza, su contemplación… y las reacciones que provocan en el alma. Eso sí, el autor no suele estar presente.

Sobre la arena
escritura de pájaros
memorias del viento.
                                 Octavio Paz

El taller fue estupendo, todos los que se acercaron aprendieron mucho y pudieron sacar, por unos minutos, al artista que llevaban dentro. Aquí tenéis algunos de los preciosos haikus que hicieron.

Marga:
Abre el alma
la lluvia radiante
con sol constante.
Amanecer
hadas y brujas juntas
felices bailan.
Merce:
Los tulipanes
despiertan mis ojos
como arcoiris.
En el hospital
el pelo cae al suelo
la mujer llora.
Laura:
No puede crecer
por unas tijeras
que rotas están.
Grito en una noche,
chispas en la gran plaza
Bruja, arde por Dios
Carlos:
Morían los niños
en campos de Europa
prisioneros, sí
Los manuscritos
cuentan del faraón
sus tropelías
Ángel:
Los libros miran
sus historias hablan
el lector sueña.
Caen las sábanas
y los ojos se abren.
Los mundos acaban.
Y ahora es vuestro turno. ¿Os animáis a mandar un haiku?